¿Se puede cambiar la aclamación del Aleluya en Misa por cualquier otro canto?
Las aclamaciones son generalmente expresiones de un estado de ánimo. Están hechas para impactar. Por eso no se trata simplemente de leerlas o decirlas, sino de cantarlas, aclamarlas o proclamarlas. Una aclamación es una expresión de júbilo, un clamor comunitario.
El Aleluya junto al versículo que lo acompaña es precisamente la aclamación al evangelio. Ayuda cantar no sólo el Aleluya, sino también ese versículo.
Esta aclamación es un acto por el que la asamblea litúrgica saluda al Señor Jesús que llega a hablarnos y se dispone a acogerlo.
No podemos cambiar esta aclamacion por cualquier canto que se nos ocurra. Leamos lo que nos dice el IGMR:
En caso de que no haya un cantor, el versículo no se canta; y éste lo puede leer quien hace la segunda lectura (si la hay) o cualquier fiel, incluso el mismo diácono o sacerdote. La liturgia no exige nada en concreto.
O, lo que es lo mismo, si el lector desde el ambón opta por leer el versículo intermedio del leccionario o evangeliario, el canto del Aleluya no deberá cantarse con otros versículos o cualquier otra frase, pues se estaría duplicando el versículo intermedio. Por tanto, es importante que coro y lector estén de acuerdo previamente.
INSTRUCCIÓN GENERAL DEL MISAL ROMANO
62. Después de la lectura, que precede inmediatamente al Evangelio, se canta el Aleluya u otro canto determinado por las rúbricas, según lo pida el tiempo litúrgico. Esta aclamación constituye por sí misma un rito, o bien un acto, por el que la asamblea de los fieles acoge y saluda al Señor, quien le hablará en el Evangelio, y en la cual profesa su fe con el canto. Se canta estando todos de pie, iniciándolo los cantores o el cantor, y si fuere necesario, se repite, pero el versículo es cantado por los cantores o por un cantor.El Aleluya se canta estando todos de pie, iniciándolo los cantores o el cantor, y se repite; y el versículo, entre los dos aleluyas, si se canta (que es lo ideal y ojalá con la participación de toda la asamblea litúrgica) lo debe entonar un cantor o el mismo coro.
a) El Aleluya se canta en todo tiempo, excepto durante la Cuaresma. Los versículos se toman del leccionario o del Gradual.63. Cuando hay solo una lectura antes del Evangelio:
b) En tiempo de Cuaresma, en vez del Aleluya, se canta el versículo antes del Evangelio que aparece en el leccionario. También puede cantarse otro salmo u otra selección (tracto), según se encuentra en el Gradual.
a) En el tiempo en que debe decirse Aleluya, puede tomarse o el salmo aleluyático o el salmo y el Aleluya con su versículo.64. La Secuencia, que sólo es obligatoria los días de Pascua y de Pentecostés, se canta antes del Aleluya.
b) En el tiempo en que no debe decirse Aleluya, puede tomarse o el salmo y el versículo antes del Evangelio, o solamente el salmo..
c) El Aleluya o el versículo antes del Evangelio, si no se canta, puede omitirse.
En caso de que no haya un cantor, el versículo no se canta; y éste lo puede leer quien hace la segunda lectura (si la hay) o cualquier fiel, incluso el mismo diácono o sacerdote. La liturgia no exige nada en concreto.
O, lo que es lo mismo, si el lector desde el ambón opta por leer el versículo intermedio del leccionario o evangeliario, el canto del Aleluya no deberá cantarse con otros versículos o cualquier otra frase, pues se estaría duplicando el versículo intermedio. Por tanto, es importante que coro y lector estén de acuerdo previamente.
Leave a Comment